La felicidad sólo es real cuando se comparte
Mientras me pongo a escribir y pienso como empezar esto, escucho una canción bastante bizarra "El Amor" de Ricardo Arjona, muy básica, asquerosamente metafórica. Que sorpresa ¿no? Si, soy yo otra vez, hablando de esta sensación. 
Pienso y recuerdo la charla que tuve hace dos semanas, en la que decían que usamos un personaje para tapar a nuestra persona real, que la vergüenza nos bloquea y cuando nos quejamos de las cosas que no hicimos o dejamos de hacer, no estamos quejando de esta careta, no de nosotros. "Es tarde para elegir" me dice Guasones, no creo en esa palabra, no creo que sea tarde para nada; decimos eso para conformarnos, excusarnos y rendirnos. No es tarde porque no hay tiempos que nos limiten, son las ganas, se trata de querer cambiar algo o, simplemente dejarlo ir. No es tarde para quererte ni para que me quieras, no es tarde para volver ni para dejarte, no perdimos el tiempo, lo vivimos. Pero necesitamos de otras cosas, no nos necesitamos ni siquiera de la forma sana y eso no tiene que ver con minutos, horas, días o meses, tiene que ver con vos y tu inseguridad, tus miedos, tu careta. Y conmigo (¿por qué no?) mi ansiedad, mis miedos, mi careta. Quiero conocer a alguien que se desnude frente a mi como no lo hizo nunca con nadie, que tenga miedos y los demuestre, que no le de vergüenza ser él. 
Quiero dejar de reprocharle a mi careta lo que no hice, lo que hubiese hecho, quiero no tener miedo de demostrar. 



"Cuando una cierra la puerta una vez, nunca vuelve a ser la misma, algo se corta" 

No hay comentarios:

Gracias por leerme!!!

Datos personales

Mi foto
Buenos Aires, Argentina
No fumar sin desayuno

Archivo del blog